Gran actuacion de los representantes de la A.V.F.B. En Barcelona

La expedición valenciana.

El alto nivel de los equipos participantes no fue obstáculo para que los valencianos demostraran su calidad. Maxplas y Cultural Botompédica llegaron hasta las semifinales, un gol de oro y otro polémico respectivamente les privaron de la final. El Nastic y el debutante Torino se codearon con la flor y nata del futbol de botones, estando a la misma altura. Anbalsal rozo la final de consolación. La Botonoplástica, el otro debutante rindió muy bien en la copa Federación, lastima esa falta que dio en el palo...

Enhorabuena a todos !!!

Otra Apertura para el Maxplas.

Hoy se ha celebrado la XXI edición del torneo Apertura - II memorial Fernando Ricart. La inscripción ha sido buena, a pesar de algunas bajas de última hora. La duración de los partidos era de 22 minutos, lo que obligaba a los equipos estar muy concentrados, ya que un gol era casi la sentencia. Durante el torneo ha habido muchas sorpresas. La nueva pelota oficial va a dar mucho de qué hablar, los equipos no se han familiarizado aun con ella. El Maxplas de Manolo Ricart, venció en la final por un solitario gol, a un sorprendente Picapedrestre del Turia de Miguel Hervas, que sin duda ha sido el equipo revelación del torneo. Seguro que la celebración del segundo puesto para los de L´0riguilla será sonada... Enhorabuena a todos los participantes y a la organización, que una vez más ha sido la esperada en estos casos, a pesar de las pocas facilidades.




Los dos finalistas.

Primer número de la revista El Botonista Amateur

La revista recoge lo que acontece en las distintas asociaciones nacionales e internacionales.

La Asociación Valenciana de Futbol de Botones no podía faltar al ser una de las más activas, con un pequeño resumen de nuestra liga, más dos hojas del prestigioso torneo Mediterráneo.

De gente como De Gea o la voragine del mercado

El protagonista de la noticia, dirigiendo un entrenamiento 
pocos días antes, cuando nadie podía imaginar lo que sucedería luego
Cuentan los diarios deportivos y no acaban de lo vivido en las ultimísimas horas en torno al no-fichaje del portero DE GEA por el Real Madrid, pero este no es el único caso de campanillas dentro de los que se han producido este año en el siempre movido mercado de fichajes de verano.







En un pueblecito de la provincia de Badajoz, sin irnos más lejos, el sevillano VEQUER BOTÓN CLUB, de reciente fundación, se hacía de manera sorprendente con los servicios del hasta esa fecha  indiscutido entrenador de la CULTURAL BOTOMPÉDICA DE BENIMACLET, pillándonos a todos los cronistas de los medios –en playas y piscinas en ese momento-, con el pie cambiado y a remojo.
El mister de la CULTU aprovechaba su estancia estival en aquellos parajes para firmar un contrato, cuyos términos exactos no han transcendido pero cabe suponer suculento, con el nuevo club del Nervión, dejando en evidencia al staff de su anterior equipo y en la estacada a los de la capital del Turia justo a las puertas del inicio de la temporada que se avecina.
Cierto que los sevillistas han destacado siempre por su especial habilidad en pescar y fichar los mejores peces, ya que hablamos de ríos, en el río revuelto por antonomasia que es el mercado futbolístico internacional, gracias sobre todo a las excelentes vista y reflejos que Monchi conserva aun de sus tiempos de guardameta. Sin embargo en esta operación al parecer no intermedió siquiera el renombrado ojeador hispalense, sino que fue el máximo mandatario y fundador del club Sr. PRIETO quien en persona y en moto se desplazó al lugar habitual de concentración veraniega de la Cultu para abrir y cerrar en un visto y no visto la operación, logrando volverse a casa en apenas si un día que duró el proceso con el laureado mister en el bolsillo (nunca mejor dicho).
Tras de la inicial sorpresa, el factotum de la Cultural nos explicaba a los enviados especiales allí desplazados al efecto (o sea ad hoc y aun en bermudas y chanclas) que él mismo había tomado parte activa en el fichaje, si bien lo había hecho de forma involuntaria, pues había creído estar firmando transfer de un segundo de a bordo (de los muchos que componen el bien nutrido cuerpo técnico de este club señero) cuando lo que en realidad hacía era nada menos que estampar su firma en el acuerdo por el que el entrenador primero de la CULTURAL BOTOMPÉDICA, identificado así mediante una rayita pintada que como tal lo acreditaba, pasaría a serlo de inmediato del VEQUER BC
Aclaraba también el factotum de la CULTU que, enterado del error, su homónimo del VEQUER, hombre de honor, de inmediato le había ofrecido deshacer el trato y reintegrar al mister a su puesto originario. Pero que había sido él (el Sr. ESPADA), quien había declinado entonces el descambio, porque al honor con no menor honor quería corresponder, y también porque desde la perspectiva que le ofrecía haber llegado ya al final del caso, veía en lo sucedido una señal de los dioses del fútbol, que tal vez le estaban indicando así,–pues el lenguaje de dioses y astros del balón, y quien dice balón dice también botón, suele ser un tanto críptico y cabalístico: recuerden ustedes, por ejemplo, frases míticas como la de “fútbol es fútbol”, etc-, tal vez le estaban indicando –digo- que había llegado el momento de dar un brioso golpe de timón a la poderosa nave que gobernaba, la CULTURAL BOTOMPÉDICA, en pos de nuevas y aun mayores aventuras y, por qué no, conquistas de gloria botonístico deportiva.
Y, puesto que aunque sin darse cuenta, era esto, y no menos, ni más, lo que había hecho, bien hecho estaba sin duda.
Añadiendo, para terminar, que le deseaba la mejor de las suertes al viejo mister en su nueva singladura, igual que al recién nacido VEQUER BC, para el que sólo tenía palabras de amistad y de elogio, y al que dedicó, poniendo con ello broche de oro (de Torre del Oro) a su intervención, un súbito alarido de:
-¡Viva er VEQUER, manque pierda!
Con tal sincero tono que arrancó de todos nosotros, los plumillas a la sazón allí reunidos, -todos viejos pellejos, por cierto, curtidos en mil batallas-, un sentimiento de sincera emoción, seguido de varios "Vivas" nuestros con que secundábamos aquél primero del digno mandatario acompañados de una prolongada salva de aplausos.


Autor: Marcelo Suarez